No pierdas la oportunidad de amar

…Un gran amante siempre está dispuesto a dar amor y no se preocupa de si es correspondido. Siempre es correspondido, esa es la naturaleza de las cosas. Es como ir a la montaña y cantar una canción y los valles responden.

¿Has oído el eco en las montañas? Tú gritas y los valles gritan o tú cantas y los valles cantan. Cada corazón es un valle. Si le viertes amor, te devolverá el amor.

La primera lección de amor es no pedir amor, sino simplemente dar. Conviértete en un dador.

La gente hace exactamente lo contrario. Incluso cuando dan, lo hacen sólo con la idea de que el amor debe ser correspondido. Es un trato. No comparten, no comparten libremente. Compartir bajo condiciones. Siguen mirando de reojo para ver si el amor regresa o no. Mucha gente pobre... desconoce el funcionamiento natural del amor. Simplemente derrámalo y vendrá.

Y si no viene, no hay de qué preocuparse, porque el amante sabe que amar es ser feliz. Si llega, bueno, entonces la felicidad se multiplicará. Pero incluso si nunca llega, en el mismo acto de amar uno se vuelve tan feliz, tan extasiado, que ¿a quién le preocupa si volverá?

El amor tiene su propia felicidad. Sucede cuando amas. No es necesario esperar el resultado. Simplemente empieza a amar. Al final, verás regresar mucho más amor a ti. Se ama y se comprende que el amor sólo se consigue amando. Así como se aprende a nadar nadando, así también amando: ama.

La gente es muy callada. Están esperando que aparezca algún gran amor y entonces amarán. Siguen cerrados, siguen aislados. Ellos solo están esperando. Algunas Cleopatra vendrán de alguna parte y entonces abrirán sus corazones, pero para entonces habrán olvidado por completo cómo abrirlos.

No pierdas la oportunidad de amar. Incluso caminando por la calle, puedes amar. Puedes ser cariñoso incluso con un mendigo. No necesitas darle nada; puedes sonreír al menos No cuesta nada, pero tu sonrisa abre tu corazón, lo hace más vivo. Tome la mano de alguien, de un amigo o de un extraño. No esperes para amar cuando conozcas a la persona adecuada. No lo conocerás así.

Seguir amando. Cuanto más amas, más probable es que lo encuentres, porque tu corazón comienza a florecer. Y el corazón floreciente atrae muchas abejas, muchos amados.

Estás entrenado de una manera muy equivocada. Primero, todos viven bajo la falsa impresión de que ya están amando. Con sólo nacer crees que estás amando. No es tan simple. Sí, hay potencial, pero el potencial debe ser entrenado, disciplinado. Hay una semilla, pero debe madurar hasta convertirse en una flor.

Puedes continuar llevando la semilla; pero no vendrá ninguna abeja. ¿Has visto abejas aterrizar en semillas? ¿No saben que las semillas pueden convertirse en flores? Lo saben, pero vienen cuando las semillas se han convertido en flores. Conviértete en una flor, no te quedes como una semilla.